El despido por quiebra de una empresa es uno de los hechos que más dudas genera. Y es que, si una empresa echa el cierre, se supone que lo hace porque no tiene dinero.
¿Qué pasa con los trabajadores ante el cierre por quiebra? La realidad es bastante cruda, lo que les espera es el despido y a partir de ahí el desempleo y cobrar el paro en el mejor de los casos (siempre que tengan derecho al mismo). Lo primero que debes tener claro es que cuando cierra una empresa, también despide a sus trabajadores.
En concreto, suele tratarse de un despido procedente por causas objetivas y la indemnización que corresponde a los trabajadores es la propia de ese tipo de despido. Es decir, que los empleados sí tienen derecho a cobrar la indemnización y el finiquito. Ahora veremos cómo y en qué cuantías.
¿Tengo derecho a cobrar el finiquito si quiebra la empresa?
Lo primero es diferenciar el finiquito de la indemnización por despido, que veremos más adelante.
El finiquito es un derecho de los trabajadores que está incluso por encima de la indemnización por despido. Y es que, el finiquito se cobra siempre. Da igual si es la empresa quien despide al trabajador, la causa del despido (incluida la quiebra) o si eres tú como empleado quien decide abandonar la empresa.
Siempre tendrás derecho a cobrar el finiquito. Este finiquito incluye las cantidades del salario que te adeuda la empresa, la parte proporcional a la paga extraordinaria que no hayas cobrado, bonus por objetivos que tuvieses que percibir y las vacaciones no remuneradas.
Vamos a verlo con un ejemplo. Imagina un trabajador al que despiden el día 15 de mayo con los siguientes datos:
- Salario mensual neto: 2.500 €
- Días de vacaciones no disfrutados: 10
- Paga extraordinaria: la parte proporcional de la primera paga, que equivale a un 75% de la paga total.
- Bonus trimestrales no percibidos: 3.000 €
¿A cuánto ascendería el finiquito? En total tendría que percibir 7.211,95 euros distribuidos de la siguiente forma:
- Salario mensual no retribuido: 1.250 €
- Días de vacaciones no disfrutados: 1.86,95 €
- Paga extraordinaria: 1.875 €
- Bonus trimestrales no percibidos: 3.000 €
Ese sería el finiquito del trabajador, que la empresa debería pagar incluso si entra en concurso de acreedores.
¿Se cobra indemnización por despido si cierra la empresa?
Con la indemnización por despido ocurre lo mismo que con el finiquito. Es un derecho de los trabajadores que no se extingue porque la empresa esté en quiebra.
En resumen, que los trabajadores también cobrarán la indemnización por el cierre de la empresa. Incluso si se trata de una quiebra.
¿A cuánto ascenderá esta indemnización? Al tratarse de un despido procedente por causas objetivas, la indemnización será de 20 días de sueldo por año trabajado con un máximo de 12 mensualidades.
Esta indemnización se aplicará tanto a despidos individuales como colectivos.
A la hora de calcular la indemnización por concurso de acreedores solo hay que dividir el salario bruto entre los 12 meses que tienen un año y la cantidad resultante entre los 30 días del mes. Lo siguiente será calcular el número de meses cumplidos con la empresa y de ahí obtendrás la cuantía que te corresponde como indemnización.
Vamos a verlo con los datos del ejemplo anterior, suponiendo que ese trabajador ha estado 5 años en la empresa. En ese caso tendrá derecho a percibir 8.333,33 euros.
¿Y si la empresa no tiene dinero para pagar?
Esta es una pregunta lógica si tenemos en cuenta que muchas empresas que cierran lo hacen porque han entrado en concurso de acreedores. En otras palabras, que no tienen dinero para seguir manteniendo la actividad ni pagar el salario de los empleados y mucho menos su finiquito.
Cuando la empresa no tiene dinero para hacer frente a las nóminas de sus trabajadores o a su finiquito e indemnización porque ha entrado en concurso de acreedores quien entra en juego es el Fondo de Garantía Salarial o FOGASA.
La labor del FOGASA es precisamente garantizar que los trabajadores no están desprotegidos si su empresa es insolvente. Así, el FOGASA se hará cargo de los salarios y de las indemnizaciones pendientes, aunque dentro de un límite.
Límite para salarios
El organismo pagará hasta el doble del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) por un tiempo máximo de 120 días, que equivale a 4 meses.
A efectos prácticos, esto quiere decir que se pueden cobrar 92,08 euros por día a través del FOGASA, contando que las pagas extraordinarias estén prorrateadas.
En el mejor de los casos esto se traduce en 11.049,60 euros en total en el mejor de los casos.
Límite para las indemnizaciones
El límite para las indemnizaciones por cierre que paga el FOGASA es diferente. En este caso asciende a un año de salario y hasta dos veces el SMI.
La cantidad máxima resultante en este caso es de 33.152 euros como máximo.
Lo que no cambia es el cálculo de la indemnización, que será de 20 días por año trabajado hasta un máximo 12 anualidades aunque sea el FOGASA quien pague.
Que quiebre la empresa o que pague el FOGASA tampoco altera tu derecho a cobrar el paro o el subsidio por desempleo, siempre que cumplas con los requisitos para hacerlo.
¿Cuánto tarda el FOGASA en pagar?
El plazo legal para que el FOGASA resuelva y abone el finiquito y la indemnización es de tres meses desde la solicitud, aunque en la práctica es habitual que se extienda ente 6 y 12 meses.
En caso de que FOGASA no responda dentro del plazo legal, habría que presentar una reclamación administrativa o acudir a la justicia social.
¿Qué hacer para cobrar el finiquito si quiebra la empresa?
Ahora que ya sabes qué pasa con el finiquito cuando la empresa quiebra, vamos a ver cómo actuar paso a paso.
- Reclamar la deuda a la empresa o al administrador concursal.
- Esperar la resolución judicial de quiebra de la empresa.
- Solicitar a FOGASA el pago de las indemnizaciones. Dispones de 1 año para hacerlo desde el acto de conciliación o sentencia o perderás el derecho a cobrar.
- Esperar la resolución y el pago por parte de FOGASA, que debería de llegar en un plazo de 3 meses.
En cualquier caso, la mejor forma de estar preparado para eventualidades de ese tipo es disponer de un plan de ahorro y de un colchón financiero que te permita mantener tu nivel de vida sin tener que endeudarte durante el máximo tiempo aunque la empresa quiebre.
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