Voluntariado para jubilados
El equipo de redacción de MAPFRE lleva más de 10 años preocupándose por tus ahorros y porque sigas manteniendo una buena calidad de vida en el momento de la jubilación. Pero no solo eso, aquí encontrarás información útil y práctica sobre relaciones laborales, impuestos, prestaciones y mucho más.
Los años de experiencia de MAPFRE en el sector nos avalan como fuente de información veraz y práctica para acompañarte en las diferentes etapas de tu vida.
El mundo no se acaba cuando te jubilas. Tras dejar el trabajo empieza una nueva etapa en la que se tiene más tiempo libre y en la que aún se pueden emprender nuevas metas como puede ser sacarse un título universitario o aprovechar este momento para ayudar a la gente más necesitada. Por eso, en este artículo te presentamos varias ideas para voluntariado que puedes emprender al alcanzar tu jubilación.
Realizar un voluntariado una vez que estás jubilado es una buena idea porque es el momento en el que dispones de más libertad y no dependes de nadie. De esta manera puedes dedicar tu tiempo a hacer algo que realmente te llena y si lo que te hace feliz es ayudar, entonces puedes dar el paso presentándote en una Organización Sin Ánimo de Lucro. Hay que recordar que un voluntariado no es un contrato laboral y que consiste en poner un granito de arena para hacer un mundo mejor y devolver a la sociedad un poco de lo que te ha dado ella en el pasado.
Como decimos, pese a que un voluntario puede realizar diversas funciones, nunca debería equipararse al trabajo que se realiza en una empresa cuando se está contratado. En este caso no se trata de una obligación, sino de realizar algo que te llene interiormente. Por lo tanto, no hagas nada que no te repercuta posteriormente en sentirte más feliz.
Razones por las que es buena idea hacer un voluntariado tras jubilarte:
- Aumenta la confianza. No te dejes llevar por la corriente que piensa que los mayores de 60 años no pueden ser útiles. Realizar un voluntariado y prestar ayuda a los que la necesitan será una buena muestra de demostrar al mundo y a ti mismo que aún tienes cuerda para rato. Incrementaras tu autoestima y tu satisfacción vital.
- Te divertirás. Si no te gusta la monotonía estás de suerte, pues con un voluntariado nunca te tocará hacer lo mismo. Al trabajar con personas siempre será un día nuevo y diferente con el que vivir en plenitud tu vida.
- Aprendes nuevas habilidades. Quizás realizando un voluntariado necesites echar mano de capacidades que no habías sacado anteriormente y que ni siquiera sabias que tenias. Es el momento de descubrirte a ti mismo qué eres capaz de hacer.
- Amplia tu gama de contactos. Se dice que las personas mayores se vuelven solitarias. Ser voluntario es una de las mejores maneras de romper este estereotipo. No se puede ser voluntario cerrándose uno mismo pues es preciso estar en contacto con más personas. De esta manera ampliaras tu círculo de amigos y crearas fuertes vínculos personales.
- Podrás estar al día de las novedades. Si ahora que no tienes que trabajar te cierras en tu círculo de confort dejarás de lado todas las nuevas noticias que vayan apareciendo, pero si eres voluntario tendrás un rico intercambio generacional con el resto de personas que estén contigo. De esta manera podréis intercambiar saberes y conocimientos culturales, aprendiendo los unos de los otros.
Tipos de voluntariado para mayores
Si después de leer todas las razones anteriores te has decidido a ser voluntario, te resumimos los voluntariados más comunes para que elijas el que mejor se adapta a ti.
- Voluntariado en tu comunidad. Consiste en centrarse en las personas más cercanas a tu hogar o a tu barrio. Promueve este lugar arreglando los problemas que haya o denunciando posibles mejoras. Fomenta la participación ciudadana o las muestras de arte y educación.
- Exclusión social. Céntrate en los más desfavorecidos. Promueve la defensa de los derechos en aquellos colectivos como los niños, jóvenes o parados. Ayuda a que puedan tener los servicios básicos y que tengan una reinserción social más fácil.
- Cooperación al desarrollo. Contribuye a la promoción de los programas de medio ambiente, educación, derechos sanitarios o contra la pobreza que colaboren para realizar de este mundo un lugar mejor.
- Apoyo a personas discapacitadas o ancianos. Este tipo de colectivo precisará que alguien les ayude a moverse para realizar sus labores diarias. Al no ser que te sientas físicamente bien no es aconsejable que realices tales acciones. Sin embargo, esto no significa que no tengas nada que aportar, pues muchas veces se olvida la importancia de que alguien sirva de apoyo moral. Aprovecha tus dotes comunicativas y tu empatía para que esas personas no se sientan abandonadas por la sociedad.
- Formación. A lo largo de tu vida has sido un profesional y tienes muchas anécdotas y vivencias que merecen la pena ser contadas. Comparte tus conocimientos en foros o mesas redondas e intercambia ideas con las nuevas generaciones.
Ahora que conoces los tipos de voluntariado que puedes realizar llega el momento de contactar con la entidad en la que realizar tu labor. Quizás conozcas algún centro cercano a tu casa que precisen de ayuda y que les puedas ser útil. Si no es así puedes echar un vistazo a la web de “hacesfalta.org”, donde podrás tener una lista de varios proyectos de voluntariado donde seguro que encuentras uno que te interese o ver más ideas en otros artículos de Canal Jubilación. Otras alternativas son ir directamente a entidades conocidas como Cruz Roja o la Asociación Española contra el cáncer (AECC), al tratarse de lugares en los que sabes su actividad y los beneficios que aportan a la sociedad.
Como puedes comprobar, realizar un voluntariado después de jubilarte es una buena idea que te puede aportar muchas cosas y en la que tú también ayudarás a los demás. Para asegurarte de que tu jubilación es una nueva etapa de tu vida llena de grandes momentos es interesante contar con una renta que sirva de apoyo a la pensión pública. Contratar un Plan de Pensiones MAPFRE nos garantiza que nuestro futuro esté asegurado y que además podamos ahorrar mientras realizamos las aportaciones al conseguir importantes deducciones fiscales.
Me jubilo el 5 de abril y si me hará ilusión hacer algún tipo de voluntariado
Pero que no se me ocurre en que lugar ni tampoco estar agobiada con una obligación
Me gusta mucho relacionarme con la gente , relaciones con gente pero que no sea deprimente