Mejor edad para abrir un plan de pensiones
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Los años de experiencia de MAPFRE en el sector nos avalan como fuente de información veraz y práctica para acompañarte en las diferentes etapas de tu vida.
Según un estudio realizado por Inverco, casi la totalidad de los españoles (98 por ciento) se muestra preocupada por la sostenibilidad del sistema público de pensiones, pero solo el 75 por ciento ahorra para complementar la pensión pública, y de ese porcentaje, solo un 19,4 lo hace con una periodicidad mensual.
Ante esta situación de incertidumbre, quienes piensan en ahorrar de cara a la jubilación suelen acudir al sector privado y, especialmente, a los planes de pensiones, que son uno de los productos estrella en este campo. Pero, ¿a qué edad es conveniente abrir un determinado plan de pensiones?
Recordemos que un plan de pensiones es una herramienta de ahorro a largo plazo en la que los partícipes hacen aportaciones periódicas de capital que se invierten en busca de rentabilidad.
Por lo tanto, cuanto más dinero se aporte, mayor será el beneficio, o lo que es lo mismo, cuanto antes se empiece a ahorrar, más dinero se habrá aportado aprovechándose durante más tiempo del interés compuesto.
¿A qué edad comenzar para abrir un plan de pensiones?
La respuesta no es unánime, ya que depende de factores personales. Lo primero es que se debe contar con unos ingresos estables y que estos resulten suficientes para permitir el ahorro.
Si se tiene en cuenta la más que posible reducción de las pensiones públicas y se quiere disfrutar de una cierta calidad de vida cuando llegue la jubilación, no hay otra solución, como aconsejan los expertos, que empezar a ahorrar cuanto antes y hacerlo de una manera constante para ir construyendo un mayor patrimonio sin tener que realizar un gran esfuerzo financiero.
En cualquier caso, y si las circunstancias lo permiten, lo ideal es comenzar cuando se produzca la incorporación al mercado laboral. Si esto no fuera posible, se recomienda hacerlo en el tramo de edad comprendido entre los 35 y los 40 años.
Perfil de riesgo según la edad
La edad a la que se suscribe un plan de pensiones es fundamental para asumir un determinado nivel de riesgo. Dado que no existe penalización por traspasos de planes de pensiones, la clave está en ir modificando el porcentaje de renta variable y renta fija en función de la edad y de las necesidades económicas que se presenten en cada momento.
Entre 30 y 40 años
Los expertos recomiendan a los que empiezan muy jóvenes -entre 35 y 40 años– planes agresivos con altas rentabilidades. Por ejemplo, una mezcla de renta fija del 40 por ciento con una de renta variable del 60.
Para los más conservadores, otra opción es apostar por los seguros de vida-ahorro, ya que ofrecen una garantía de rentabilidad.
Entre 40 y 60 años
A medida que se acerca la edad de jubilación se puede ir optando por incrementar la parte de renta fija (destinando más del 60 por ciento) en detrimento de la variable, que es mucho más volátil.
En esta etapa, es interesante contratar un Plan Individual de Ahorro Sistémico (PIAS). Aunque son menos atractivos que los planes de pensiones más arriesgados, ofrecen mayor liquidez y una rentabilidad asegurada.
Más de 60 años
Pasados ya los 60 años, se recomienda apostar por la renta fija, con poco riesgo, que permita asegurar el capital que se ha construido con tanto esfuerzo a lo largo de los años.
Lo correcto sería diversificar la inversión destinando no más del 25 por ciento a planes de renta variable global o mixtos, y el 75 a fondos de renta fija con perfil de riesgo moderado
En cuanto a productos interesantes en esta etapa encontramos los planes de pensiones de renta fija a corto plazo (24 meses), y los Planes de Previsión Asegurados (PPA).
¿Cuál es el mejor momento para el rescate de un plan de pensiones?
Una de las características de los planes de pensiones es su escasa liquidez. Se crearon con la finalidad de proporcionar un medio que permitiese crear un ahorro complementario para la jubilación.
Esta es, por lo tanto, la forma más común y sencilla de rescatar el plan de pensiones.
Sin embargo, en la actualidad se puede rescatar por adelantado en aquellas situaciones que generen vulnerabilidad económica a sus partícipes, entre las que podemos citar: incapacidad laboral, enfermedad grave, desempleo de larga duración o fallecimiento del titular.
Asimismo, a partir del 1 de enero de 2025, se podrán rescatar las participaciones con, al menos, diez años de antigüedad sin tener que acreditar ninguna otra circunstancia.
Ventajas fiscales de los planes de pensiones
Los planes de pensiones, mientras se están realizando aportaciones, presentan importantes ventajas fiscales en la declaración de la Renta. Las aportaciones serán deducibles hasta un máximo de 1.500 euros o hasta un 30 por ciento de la base imponible si el partícipe es menor de 50 años y del 50 por ciento si supera dicha edad.
Ahora bien, a la hora de proceder a su rescate, hay que saber cómo hacerlo para no salir perjudicado.
El rescate de un plan de pensiones se puede hacer de tres formas:
- En forma de capital (un único pago).
- En forma de renta (pagos periódicos).
- En forma mixta (combinando las dos anteriores).
La forma más perjudicial es la primera, porque Hacienda lo consideraría como renta de trabajo.
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