Reskilling. Todo lo que debes saber

Juan Gutiérrez

Consultor

Licenciado en ADE en la Universidad Complutense de Madrid, Máster en Gestión Empresarial y en Dirección de Proyectos (PMP). Actualmente es director del departamento de consultoría, especializado en el asesoramiento y desarrollo de empresas y negocios mediante el formato de comercio asociativo.

Darwin dijo que “las especies que sobreviven no son las más fuertes, ni las más rápidas, ni las más inteligentes; sino aquellas que se adaptan mejor al cambio”.  Y de eso va precisamente el reskilling, de preparar al capital humano de nuestra empresa para los nuevos retos. Apostar por la formación es una buena opción a cualquier edad.

La primera revolución industrial, allá por el 1760, con la aparición del vapor y la producción mecanizada cambió las reglas del juego de forma drástica. Hacia el 1800, le toco a la aplicación de la electricidad en los procesos productivos. En la década de los 90 irrumpió con fuerza la informática y la gestión del uso de la información y hoy en día la inteligencia artificial, el metaverso o el blockchain están volviendo a cambiar las reglas del juego.

¿Qué es el reskilling?

El reskilling es el proceso por el cual una persona desarrolla nuevas habilidades para poder hacer frente a un nuevo trabajo.  En un mundo que evoluciona a un ritmo vertiginoso, la formación multidisciplinar es casi una obligación. Ya no vale con ser bueno en lo que hagas, tienes que conocer la tendencia de la evolución de tus tareas y avanzar con ella.

Para una empresa es más rentable dotar de nuevas capacidades a sus empleados que buscar profesionales externos con esa capacitación específica.

Por norma general, tanto el reskilling como el upskilling hacen referencia a procesos vinculados con el desarrollo tecnológico, pero es así porque es el sector que mayor desarrollo tiene en la actualidad.

¿Qué es el upskilling?

Si decíamos que el reskilling es dotar de nuevas capacidades a nuestro personal, el upskilling hace referencia a mejorar las competencias o los conocimientos que ya tenía previamente ese trabajador o trabajadora en concreto.

Ambos términos hablan de capacitar personas, pero el reskilling se centra en el desarrollo de nuevas habilidades y el upskilling en la mejora de las ya desarrolladas.

Nuevos talentos

Un nuevo proceso o una nueva forma de desarrollar un proceso conocido requiere de una capacitación específica para esa labor. Eso se puede contratar (nuevo empleado) o crearlo (upskilling/ reskilling).

Ambas opciones son válidas, pero por norma general compensa formar a un empleado interno que contratar un nuevo perfil.

De hecho, según el último informe publicado por CoachHub, la mayor plataforma de coaching a nivel mundial, el 70% de las empresas españolas prefiere formar a sus empleados antes que buscar talento fuera y se estima que para 2025, más del 40% de los trabajos habrán sufrido cambios que impliquen reciclaje.

Por el contrario, desde FUNDAE (Fundación Estatal para el Empleo) advierten que el año pasado solo el 20% de las empresas españolas aprovecharon los fondos de formación bonificada estatal.

Mercado de trabajo vs evolución digital

La conclusión a la que están llegando muchas empresas, sobre todo aquellas con base tecnológica es que el mercado de trabajo no es capaz de cubrir las nuevas necesidades laborales derivadas de la evolución de la tecnología y esto provoca o bien la desactualización de los procesos de la empresa o la necesidad de buscar talento fuera de la empresa, perfiles muy demandados y por lo tanto muy caros.

El reskilling es una alternativa económica, sencilla y muy rentable en el corto y medio plazo, pero requiere de una planificación e implementación casi inmediata.

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