Para entender el cheque de los 12.000 euros hay que saber qué es la jubilación demorada: hace referencia a la posibilidad de prolongar la vida laboral una vez alcanzada la edad establecida legalmente. Tanto los asalariados por cuenta ajena como los autónomos pueden decidir de manera voluntaria si continuar desempeñando su trabajo amparándose en esta situación o solicitar la pensión cuando le corresponda.

Seguir trabajando a pesar de haber alcanzado y sobrepasado la edad ordinaria de jubilación supone una serie de beneficios económicos, entre los que se encuentra este cheque.

¿Qué beneficios tiene la jubilación demorada?

Los trabajadores que decidan retrasar su jubilación más allá de la edad ordinaria tienen derecho a un complemento económico en la futura pensión. Las alternativas entre las que pueden elegir son:

  • Un aumento del 4 por ciento en la prestación por cada año completo que se cotiza tras cumplir la edad ordinaria de retiro. Este incremento adicional se recibirá cuando la persona se jubile repartido de forma mensual.
  • Un único pago a tanto alzado, parecido a una indemnización, conocido como “el cheque”, que oscila entre 4.786 y 12.060 euros aproximadamente por cada periodo cotizado. Esta cuantía varía en función del tiempo que se haya trabajado antes de solicitar la jubilación demorada, así como de la pensión que correspondería si se optara por jubilarse.
  • Una combinación de ambas opciones.

Cómo conseguir el cheque de 12.000 euros

Para alcanzar el cheque máximo de 12.060 euros es necesario haber cotizado, como mínimo, 44 años y 6 meses por la base máxima. No obstante, para los 4.786 euros basta con haber cotizado por la pensión mínima siempre que se trate de menos de 44 años y 6 meses a la Seguridad Social.

A día de hoy, apenas un 5% de los jubilados cumplen con las condiciones necesarias para acceder a la cuantía máxima que ofrecen estos cheques.

Aunque el Estado proporciona una serie de incentivos a quienes deciden continuar trabajando, es importante complementar la prestación pública con un Plan de Pensiones MAPFRE. Este producto se debe contratar cuanto antes durante la vida activa para garantizar un mayor bienestar en el futuro.

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