Todas las sociedades de capital en España están obligadas por ley a celebrar una Junta General de Accionistas de forma anual. Esto aplica tanto a las entidades privadas (empresas) como públicas (colegios, universidades, asociaciones, etc.), ya que en todos los casos es necesario analizar la situación y tomar decisiones de cara al futuro.

¿Qué es una junta de accionistas?

Como su propio nombre indica, se trata de una reunión donde los miembros deliberan sobre cuestiones importantes referentes a la gestión y la situación del organismo. En otras palabras, puede decirse que es uno de los principales órganos de gobierno de una compañía u otro ente.

Las juntas de accionistas pueden ser ordinarias o extraordinarias. La primera se debe celebrar de modo preceptivo una vez al año, en concreto durante los 6 primeros meses después de cerrar el ejercicio. En el segundo caso, es posible convocarla en cualquier momento siempre que exista un motivo justificado.

¿Quiénes participan en una junta de accionistas?

Todos los accionistas pueden asistir a una junta, es decir, los propietarios de la empresa u organismo. No obstante, según los estatutos que rijan en cada caso, es posible que se establezca la necesidad de contar con un número mínimo de acciones para poder participar en este tipo de reuniones.

Además, cuando alguna persona no puede estar presente se establece la opción de delegar su voto a través de algún medio reglado. El representante puede ser otro accionista o alguien ajeno, así como el presidente del Consejo de Administración o cualquier miembro de la organización.

¿Qué cuestiones se tratan en una junta de accionistas?

Entre los temas más relevantes que se suelen deliberar en una Junta General de Accionistas se encuentran los siguientes:

  • Analizar la gestión de la empresa o sociedad.
  • Modificar los estatutos sociales.
  • Aprobar las cuentas anuales y la distribución del resultado.
  • Nombrar o cesar a los miembros del Consejo de Administración y los auditores externos.
  • Valorar la posibilidad de disolver la entidad.
  • Aprobar la reducción o el aumento de capital
  • Autorizar los sistemas de retribución de los altos directivos.
  • Debatir sobre la fusión, transformación o separación de la sociedad.
  • Cualquier otra cuestión que establezca la ley o los estatutos.

¿Cómo se hace una junta de accionistas?

En la mayoría de los casos, las juntas de accionistas se desarrollan de la siguiente manera:

  1. Para que la reunión se celebre es obligatorio enviar una convocatoria a los miembros donde se especifique el nombre de la compañía, los temas a tratar, la fecha y hora.
  2. En el momento fijado se debe establecer la mesa que será la encargada de dirigir el desarrollo de la reunión. Por norma general, el presidente y el secretario de la junta son los mismos que los del Consejo de Administración.
  3. A continuación, se debe pasar lista de los accionistas que se encuentran presentes o que están debidamente representados en otras personas. También se determina el importe del capital social de estos miembros.
  4. La junta se considera constituida cuando se cumple con el número mínimo de asistentes que establecen los estatutos.
  5. El siguiente paso consiste en leer el orden del día y explicar las intervenciones que se van a suceder.
  6. Durante el desarrollo de la reunión, los participantes tienen derecho a solicitar información o aclaraciones sobre cualquier asunto que se esté tratando y que se resolverán una vez que haya finalizado el turno de intervenciones.
  7. Posteriormente se procede a la votación de las propuestas que se hayan convenido. Normalmente, es necesario alcanzar mayoría simple para que se adopten los acuerdos, aunque en determinadas situaciones se precisa una mayoría superior.