Aunque el “gran tenedor” no es un concepto nuevo, hasta el 31 de marzo de 2020 no se estableció a nivel estatal. Debido a la pandemia de coronavirus el Gobierno adoptó medidas urgentes para la protección de los inquilinos en situación de vulnerabilidad, a través del Real Decreto-ley 11/2020.

Según la Ley de Vivienda de mayo de 2023, también están incluidos en esta categoría los propietarios de una superficie construida de más de 1.500 metros cuadrados de uso residencial, y el número de inmuebles en propiedad baja a 5 si están ubicados en zonas declaradas tensionadas por la comunidad autónoma donde se encuentren.

La importancia de las zonas tensionadas para el alquiler

Recordemos las zonas tensionadas son aquellas que cumplen cualquiera de estos dos requisitos:

  • La carga media del coste de la hipoteca o del alquiler en el presupuesto personal o de la unidad de convivencia, más los gastos y suministros básicos, supera el 30% de los ingresos medios de los hogares.
  • El precio de compra o de alquiler de la vivienda ha aumentado en esa zona al menos 3 puntos por encima del IPC autonómico correspondiente en los últimos 5 años.

Declarar una zona tensionada implicará modificar el régimen de prórrogas de los contratos, ya que el arrendatario podrá solicitar una prórroga extraordinaria por plazos anuales (durante 3 años como máximo) durante la cual se seguirán aplicando las mismas condiciones del contrato en vigor y el arrendador estará obligado a aceptar esta prórroga. Además se limitará el precio del alquiler.

¿Cómo me afecta ser gran tenedor?

Para empezar, tienes limitaciones para actualizar el precio del alquiler. Desde marzo de 2022, los propietarios no pueden actualizar las rentas más allá del 2% y así será hasta el 31 de diciembre de 2023, y durante 2024, en los contratos de arrendamiento de vivienda en los que proceda actualizar la renta, el incremento no podrá superar el 3% en el caso de grandes tenedores.

¿Cómo me afecta que mi arrendador sea un gran tenedor?

Es importante como arrendatario, saber si el propietario de la vivienda que tienes alquilada es un gran tenedor, porque en ese caso hay una serie de ventajas para ti. Uno de los métodos más efectivos para averiguarlo es solicitando una “nota de localización” en el Registro de la Propiedad. Esta nota te permitirá ver cuántas propiedades tiene tu arrendador en todo el territorio nacional.
Si tu arrendador es un gran tenedor, tú como arrendatario tienes algunos derechos y beneficios, que son:

Limitación en el precio del alquiler

Tal y como hemos señalado, los propietarios considerados grandes tenedores no pueden actualizar las rentas más allá del 2% durante todo 2023, y en 2024, en los contratos de alquiler en los que haya que actualizar la renta, la subida no podrá superar el 3%.

Alquiler social

En casos de desahucio por impago, el gran tenedor tiene la obligación de ofrecer un alquiler social al inquilino por un periodo de tres años antes de proceder con el desahucio. Es importante destacar que el alquiler social no debe superar el 30% de los ingresos del inquilino o el 15% del valor catastral de la vivienda.

Es importante, seas arrendador o arrendatario, contar con un buen Seguro de Hogar como los que ofrece MAPFRE, en los que puedes contratar Defensa Jurídica por si necesitas asesoramiento.

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