El registro del salario de los empleados es obligatorio y exigible desde el 14 de abril de 2021. Todas las empresas deben detallar en este listado las retribuciones de todo el personal de la compañía. A continuación, detallamos para qué sirve, cómo se elabora y cuáles son sus objetivos.

¿Qué es?

El registro salarial de las empresas es un archivo que detalla las retribuciones de todo el personal de la compañía, “al margen de su tamaño”, según se desprende del Real Decreto 902/2020 de Igualdad Retributiva entre hombres y mujeres. Esta normativa es una extensión de la obligación que establece el Estatuto de los Trabajadores -artículo 28.2- de “llevar un registro con los valores medios de los salarios, los complementos salariales y las percepciones extrasalariales de su plantilla”.

¿Qué trabajadores deben estar incluidos?

Todos los trabajadores de la empresa deben incluirse en el registro salarial, “incluyendo al personal directivo y a los altos cargos”, independientemente del tipo de contrato que ostenten y de su antigüedad en la compañía.

¿Qué datos debe contener el registro?

Según el Real Decreto, el registro salarial debe exponer el valor medio de los salarios de todos los trabajadores, incluido tanto la base, como los complementos salariales y las percepciones extrasalariales. El archivo debe desagregar la información por sexo, y reflejar “la media aritmética y la mediana de lo realmente percibido por cada uno de estos conceptos en cada grupo profesional, categoría profesional, nivel, puesto o cualquier otro sistema de clasificación aplicable”.

¿Cómo se elabora?

El Ministerio de Trabajo y Economía Social, de la mano del Ministerio de Igualdad, ofrecen la descarga gratuita del modelo en su página web para que las empresas lo utilicen. Se cumplimenta paso por paso, y el Gobierno recomienda, en su Real Decreto, que los representantes sindicales participen en la elaboración de este. Según la Ley, concretamente, deberán ser consultados “con una antelación de al menos diez días”.

¿Cuándo se debe actualizar?

Con carácter general, la referencia del registro salarial es de un año natural. No obstante, si hay una modificación relevante en los datos que constan en el archivo, la empresa puede realizar la actualización pertinente. El objetivo, según detalla el Real Decreto, es lograr la mayor transparencia en la información corporativa. Igual que en el caso de la elaboración, os cambios relevantes del registro deberán contar con el respaldo y ser consensuadas con los representantes de los trabajadores.

El objetivo del registro

La principal razón para la elaboración del registro, más allá de su obligatoriedad, es su uso para fines administrativos o judiciales. Si una compañía tiene este archivo actualizado y disponible, evitará problemas legales derivados de la Ley de Infracciones y Sanciones del Orden Social. Además, pueden existir sanciones en materia de discriminación salarial y relaciones laborales.

Los representantes de los trabajadores podrán acceder al registro, en su totalidad, y, en el caso de empresas que no tengan representación sindical, serán los propios empleados los que podrán acceder a la documentación.

Borja Carrascosa Nogales

Consultor y MBA por IE Business School

Colaborador de MAPFRE