Para algunas personas puede parecer extraño, pero existen ciertos colectivos que prefieren retrasar la jubilación para seguir permaneciendo en activo después de cumplir la edad legal de retiro. La explicación se encuentra en las múltiples ventajas que conlleva, aunque también se deben tener en cuenta algunos aspectos que limitan los beneficios.

Según la última reforma, la edad de jubilación se va incrementando hasta el objetivo de 67 años en 2027. Como consecuencia del fomento de la continuación de la vida laboral por parte del sistema público, muchos trabajadores optan por la jubilación demorada que tiene lugar tiempo después de haber alcanzado la edad ordinaria para retirarse.

¿Qué ventajas tiene retrasar la jubilación?

El retraso de la jubilación presenta una serie de beneficios en diferentes niveles:

Menor número de pensionistas

En primer lugar, se trata de una clara ventaja para el Estado. Al retrasar la jubilación, el ente público puede disponer de una mayor proporción de población activa que financia las pensiones y, al mismo tiempo, no forma parte del grupo que percibe una prestación. Esto significa que es posible mantener los ingresos por cotización mientras se posponen los gastos en pensiones.

Bonificación en la pensión

Para los trabajadores, la principal motivación de optar por la jubilación demorada es la bonificación que pueden recibir posteriormente en la pensión. Esta mejora oscila entre un 2 y un 4 por ciento por cada año que se siga en activo después de cumplir la edad ordinaria de retiro y se aplica sobre la base reguladora para calcular la cuantía definitiva.

No obstante, es necesario cumplir algunos requisitos más:

  • Se debe acreditar un mínimo de 25 años cotizados en el momento en que se cumple la edad legal de jubilación para beneficiarse de un 2 por ciento más por año en la prestación.
  • Si se ha trabajado durante más tiempo, entre 25 y 37 años, la pensión se incrementa en un 2,75.
  • En el supuesto de que se superen los 37 años cotizados, se aplica una bonificación del 4 por ciento.

Incrementar el periodo de cotización

Otra ventaja de retrasar la jubilación está relacionada con la posibilidad de completar los años cotizados que sean necesarios para conseguir una pensión del 100% de la base reguladora. Si queda poco tiempo para este objetivo, suele ser preferible continuar en activo para percibir una prestación completa.

Mantener el poder adquisitivo

En la mayoría de las ocasiones, cuando se accede a la jubilación, el poder adquisitivo disminuye, salvo si se cuenta con un plan de pensiones como los que te ofrece MAPFRE que complementa la pensión pública. Por ello, muchos trabajadores deciden prolongar su etapa laboral para continuar manteniendo el mismo nivel de ingresos.

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¿Cuáles son los inconvenientes de retrasar la jubilación?

Como contrapartida, también se deben tener en cuenta los aspectos menos positivos que supone retrasar la jubilación:

Dificultades para disfrutar de la jubilación

Es obvio que cuanto más se retrasa la jubilación, existen más probabilidades de padecer dolencias en el estado de salud que impiden disfrutar de esta etapa vital plenamente. Además, este hecho suele afectar en mayor medida a las clases menos favorecidas como consecuencia de haber desempeñado trabajos que suponen un gran desgaste físico.

Límite de la pensión máxima

A la hora de aplicar los incentivos que conlleva retrasar la jubilación, se debe tener en cuenta que la pensión pública que se puede percibir con los incrementos está limitada en la cuantía máxima establecida por ley en cada periodo. Esto significa que independientemente de los años que se continúe trabajando, no es posible cobrar una prestación superior al límite fijado.

Obstáculos del mercado laboral

Otra cuestión derivada del retraso de la jubilación está relacionada con las deficiencias del mercado laboral actual. En muchas ocasiones, cuando una persona mayor de 55 años es despedida, las posibilidades de reincorporarse a un puesto de trabajo son mucho menores que en el caso de un trabajador joven. Por lo tanto, en algunos sectores puede ser inviable continuar en la vida laboral más años, aunque se opte por ello.