Desde hace más de una década, la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM) viene luchando para que las guardias que realizan los profesionales médicos sean reconocidas y puedan cotizar para la jubilación. Reclaman el mismo trato que policías, bomberos y otras profesiones donde se realizan guardias que gozan de índices correctores en este sentido. El año de trabajo en estas profesiones se contabiliza como 1,1 o 1,2 años, lo cual permite jubilaciones anticipadas.
Las guardias son obligatorias para los médicos y sanitarios, y suponen un incremento importante de la jornada laboral total. Se calcula que un médico hace una media de cinco años de guardia durante su vida laboral. Sin embargo, esas horas de trabajo no se contabilizan como trabajadas para la cotización ni como tiempo productivo de cara a la jubilación de los médicos, si ya se supera la base máxima de cotización sin contabilizarlas.
Los sindicatos médicos reclaman que se debería reconocer un coeficiente corrector, similar al de las profesiones anteriormente citadas, en cuanto al tiempo trabajado por los médicos, sobre los 36 años y 9 meses que ahora hay que trabajar como mínimo para obtener una pensión máxima.
Los jueces consideran la Atención Continuada una expectativa de trabajo
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Las sentencias que recibieron los sindicatos médicos al respecto fueron desfavorables a sus pretensiones porque los jueces consideraron que un turno de Atención Continuada no es un trabajo real sino una expectativa de trabajo, ya que no se puede saber el número de pacientes que se va a tener, ni el trabajo a realizar. Sin embargo, según los sindicatos, esto ha cambiado actualmente por el considerable incremento de pacientes que utilizan estos servicios que, lógicamente, hace que la labor real haya aumentado también.
Los sindicatos médicos consideran que existen dos factores que la Administración debería tener en consideración en lo que respecta a la edad de jubilación de los médicos y que hoy por hoy no obtienen compensación:
- La entrada tardía en el mercado laboral de los médicos (en torno a los 29 o 30 años) debido a los requerimientos de su larga formación que, consecuentemente, retrasa el inicio de la cotización para la jubilación.
- La jornada laboral una vez están en ejercicio, que supera ampliamente la de cualquier otro trabajador.
Un problema en toda Europa
Esta pretensión de que las guardias computen para la jubilación no es un problema exclusivamente español, se da en toda Europa y por eso está coordinada a nivel europeo. Si finalmente se reconoce, los médicos podrían tener un plan de jubilación flexible y voluntario entre los 60 y los 70 años, dependiendo de las facultades físicas y mentales que conserve cada médico al llegar a esa edad (habría que pasar un examen médico para certificar que se encuentran en condiciones de seguir), así como flexibilidad para permitir que se compatibilice el trabajo a tiempo parcial con la jubilación.
Los sindicatos médicos se lamentan de que estas reivindicaciones que consideran justas no hayan encontrado acogida por parte de ninguno de los gobiernos hasta ahora, independientemente del signo político de cada uno de ellos. Consideran que la negativa a las mismas se debe no a motivos de justicia sino a otros de carácter puramente económico.
