Si planificar, en general, es complicado, en el caso de hacer planes de futuro cuando es un hijo lo que se espera, es aún más difícil. ¡Pero no imposible! Especialmente, si tienes en cuenta ciertos detalles que te ayudarán a saber cómo planificar económicamente la llegada de un hijo.

Cuatro tips esenciales para ahorrar al ser padres

Las necesidades de un recién nacido son bastante básicas en cuanto a gastos y todo el mundo las conoce: obviamente, hay cosas que vas a tener que comprar para acoger al recién nacido en el hogar, pero con un poco de planificación y sentido común, el ahorro está garantizado.

  • Organiza los regalos. Familiares y amigos suelen querer también dar la bienvenida al pequeño con presentes y la realidad es que se van a gastar el dinero aunque tú no lo quieras; por ello, es mejor que lo gasten en cosas diferentes, útiles y prácticas. Aprovecha y organiza los regalos con una lista de sugerencias adecuada y realista, los pañales y las toallitas también son regalos y eso siempre te va a venir bien, confirmado por la experiencia de millones de padres.
  • Da la bienvenida a las donaciones y explora la oferta de productos de segunda mano. Los niños crecen rápido, tanto, que ni te puedes imaginar cómo de rápido sus necesidades cambian… En pocos meses no caben ni en la mini cuna, ni en el cuco, por ejemplo. ¿Merece la pena, entonces, gastar gran parte de tu presupuesto en este tipo de objetos? Volviendo a la experiencia de otros, la respuesta es no. Si tienes la oportunidad de que te dejen este tipo de elementos, o puedes comprarlos de segunda mano, ahorrarás considerablemente y tu hijo no tendrá que renunciar a nada.
  • Sé previsor, pero limita las compras, especialmente en ropa. No hay duda de que ser previsor es una buena actitud para la planificación económica, pero cuando se trata de bebés, es importante controlar la previsión si no quieres acabar con un montón de cosas sin usar, casi sin estrenar. Compra el ajuar básico para el bebé, pero limítate en el número de cosas y en la cantidad de cada una de ellas, es muy difícil saber con qué peso nacerá tu hijo, ni a qué ritmo crecerá. Puede que compres muchos pijamas de recién nacido y nazca grande, o que apuestes por los grandes y tu hijo nazca antes de lo previsto.
  • Apuesta por la funcionalidad: comprar de acuerdo a tus necesidades. Es un impulso difícil de controlar el de comprar para un hijo, pero si evitas salir de compras sin previsiones y te ciñes a una lista planificada lograrás comprar cosas realmente necesarias y prácticas, evitando caprichos y muchas cosas que son caras y muy poco necesarias. Ante la duda, sobre elementos concretos para bebés como un esterilizador, una trona… lo mejor es dejarse aconsejar por otras familias y analizar sus casos; e incluso ir comprando poco a poco, cuando el bebé ya haya nacido y sepas realmente que es lo que necesitas en tu día a día concreto.

Con estos consejos, sabrás cómo planificar económicamente la llegada de un hijo y podrás disfrutar de un momento tan especial, sin agobios de dinero ni gastos extra y que, si le sumas otras técnicas de ahorro, te permitirán ir más desahogado. Y luego está el Seguro de Hogar MAPFRE, un gran aliado en las casas con niños donde las eventualidades suelen presentarse en el peor de los momentos y donde el tiempo siempre falta; las coberturas y asistencias MAPFRE son la solución perfecta.