Un alto porcentaje de personas pertenecientes a la Generación Senior se cae cada año. La razón primordial de este problema es la disminución progresiva de las funciones motoras, pero también influye la edad, la alimentación y el tipo de vivienda, entre otros factores.

Las caídas en personas mayores constituyen la principal causa de lesiones tanto letales como no letales y son culpables de discapacidades importantes, hospitalizaciones, pérdida de autonomía y disminución de la calidad de vida.

La mayoría de las caídas se producen en el hogar, principalmente en el baño, la cocina y los dormitorios. Las escaleras son también otro peligroso punto generador de caídas. Sea como fuere, es importante saber qué hacer ante la caída de un senior, ya que una buena actuación puede reducir en gran medida los riesgos asociados.

¿Cómo actuar ante la caída de una persona mayor?

Lo principal es no perder la calma. Hay que actuar con celeridad, pero sin precipitación, porque puede ocurrir que al actuar atolondradamente la situación empeore en lugar de mejorar.

Enumeramos algunos puntos para que nuestra actuación en estos casos sea la más conveniente y eficaz posible:

  • Comprobar el estado general de la persona: si está consciente y si presenta alguna herida sangrante, contusión o fractura.
  • En el caso de que esté consciente, hablar con ella y observar si está desorientada o no.
  • Si se encuentran otras personas en el lugar, solicitar su ayuda.
  • Si la persona no tiene dolor, se le ayudará a que se levante muy despacio. En ningún momento se le debe ayudar tirando de sus brazos. La mejor manera para hacerlo es invitarle a que se ponga boca abajo y apoye las rodillas y los codos en el suelo. Seguidamente, procurar que se incorpore hasta ponerse de rodillas. Después, podrá levantarse agarrándose a algún objeto firme o mueble, o apoyándose en la pared o en nosotros mismos.
  • Hacer que se siente y darle un poco de agua para que se tranquilice. Comprobar ya con más tranquilidad que no está desorientada y revisar otra vez si tiene alguna clase de lesión.

¿Cuándo hay que llamar a los servicios de urgencia?

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Hemos enumerado algunos puntos para actuar cuando una persona mayor se ha caído y esta, aparentemente, se encuentra bien. Pero ¿en qué casos será necesario contactar con los servicios de urgencia antes de proceder a levantar a alguien que ha sufrido una caída?

En los siguientes casos:

  • La persona, en algún momento, ha perdido el conocimiento o está desorientada.
  • Siente dolor al intentar incorporarse o presenta una deformidad llamativa en alguna extremidad. En este caso, no hay que moverla y se le colocará la cabeza de lado para facilitar la respiración.
  • Está sangrando por la herida que se ha producido, o por la nariz, la boca o los oídos.
  • Tiene nauseas o vómitos o una inhabitual somnolencia.
  • Respira con dificultad después de un golpe en el tórax. En este caso, colocar a la persona tumbada sobre el lado lesionado. Si en esa postura tiene dolor, hay que procurar sentarla.

En cualquier caso, aunque la persona mayor que ha sufrido una caída se encuentre, aparentemente, bien, lo recomendable es acudir al médico para descartar cualquier tipo de lesión interna que se haya podido producir.

Además de saber cómo actuar en caso de caída, es importante ser previsor y contar con una protección extra, como la que ofrece el Seguro de Accidentes Senior +55, una póliza diseñada expresamente para los mayores de 55 años con todas las coberturas y servicios que se necesitan en esta etapa de la vida, como cobertura de lesiones y accidentes, sesiones de rehabilitación o enfermería, ayuda a domicilio, “y tantos más momentos de tranquilidad”. Infórmate aquí de todas las ventajas.