El ahorro debería ser un hábito de nuestras vidas, más que una excepción de determinados periodos boyantes. Contar con un buen colchón económico nos permitirá afrontar etapas más complicadas con mayor facilidad o poder asumir ciertas decisiones que implican desembolsos importantes sin demasiadas preocupaciones. Por estos y otros muchos motivos es tan importante ahorrar un porcentaje del sueldo, aunque hay que saber cómo invertir según la edad.

Realizar inversión por edad

El ahorro no sólo nos permite vivir con más desahogo y darnos algún capricho de vez en cuando, sino que también es el camino hacia la jubilación. Aunque pueda parecer que aún queda tiempo para que llegue ese momento, hay que tener en cuenta que el futuro de las pensiones del sistema público está en entredicho y que si queremos seguir manteniendo el nivel de vida habitual, será necesario contar con un complemento extra.

Ya lo hemos comentado otras muchas veces: mientras antes se comience a ahorrar, mayor será el beneficio.

El ahorro a los 20 años

Lógicamente a esta edad casi nadie se plantea ahorrar. En estos momentos será cuando te integres en el mercado laboral y con él comenzarás a obtener un salario por tu trabajo. Aunque es complicado ahorrar debido a la inestabilidad de los primeros empleos y a los sueldos bajos, deberás concienciarte de lo importante que es el ahorro para tu futuro y comenzar a destinar una pequeña parte de tu salario para el ahorro.

En la medida de lo posible, deberás ir aumentando progresivamente la cantidad desde el 10 por ciento del salario, hasta el 25 por ciento para poder lograr una economía saneada. Aunque no sea una tarea fácil, tampoco es imposible. Es importante que comiences a pensar en el dinero a largo plazo, ya que durante esta época serás más proclive a realizar gastos innecesarios y a derrochar el dinero sin preocuparte de lo que vendrá.

El ahorro a los 30 años

Aunque en la actualidad, el mercado laboral no presenta su mejor cara y la temporalidad sigue siendo la tónica dominante de la mayoría de los empleos, al cumplir los 30 se supone que ya se ha conseguido cierta estabilidad en el trabajo.

Derivado de esto y de que la mayoría de personas ya han alcanzado una formación superior, los salarios y las condiciones serán mucho más favorables. Al disponer de un salario más alto, podrás destinar también una mayor parte de este al ahorro.

Lo más adecuado es que a esta edad destines un 20 por ciento, como mínimo, de tu salario al ahorro para el futuro. Piensa en ello como una inversión en un plazo de unos cinco años ya que durante esta época deberás enfrentarte a otros gastos como pueden ser el alquiler, la hipoteca o los hijos.

Aunque también sea complicado mantener este nivel de ahorro, es importante que hagas esfuerzos para conseguirlo ya que si quieres mantener un buen colchón y cuidar tu salud financiera, nunca deberás aportar menos del 15 por ciento de tu sueldo a este fin.

El ahorro a los 40 años

Debido a que mejorarán tus condiciones laborables y conseguirás una mayor estabilidad tanto económica como en trabajo, podrás destinar un porcentaje mayor de tu sueldo al ahorro. Llegada esta edad conseguirás mayores ingresos debido a que cuentas con más experiencia en tu trabajo y ya habrás hecho frente a algunos de los gastos que se habían planteado durante la etapa anterior. Este será el momento ideal para pensar en tu jubilación, si no lo has hecho antes, y aportar a tu plan de pensiones al menos el 25 por ciento de tu sueldo.

El ahorro a los 50 años

En esta época será cuando más cercana veas tu jubilación, por este motivo deberás intentar aumentar tus esfuerzos para lograr unos ahorros importantes cuando te jubiles y de esta manera conseguir conservar tu poder adquisitivo y completar tu pensión pública.

A esta edad, seguramente, ya hayas podido liberarte de la hipoteca y los gastos familiares habrán disminuido debido a que tus hijos ya son mayores y comenzarán a emprender sus vidas por sí solos. Por este motivo, debes aprovechar para darle un impulso a tus ahorros intentando destinar un 30 por ciento de tu sueldo para este fin.

El ahorro a los 60 años

Tras una vida entera dedicada al ahorro y al trabajo, una vez que veas tan cercana tu jubilación, es el momento de relajar un poco la parte que debes reservar de tus ingresos. Lo más seguro, es que si has mantenido unos buenos niveles de ahorro durante toda tu vida, en estos momentos ya dispongas de un buen colchón para hacer frente a los años futuros.

Ahora solo queda disfrutar de la cantidad que has conseguido ahorrar durante estos años y darte algún que otro capricho para disfrutar al máximo de los años de descanso que te mereces.

Como ves, nunca es demasiado pronto para comenzar con el ahorro, aunque cada edad tiene unas necesidades diferentes. Si aún te queda tiempo para jubilarte, no dudes en contratar cuanto antes un Plan de Pensiones MAPFRE con el objetivo de asegurar tu futuro.