Acceder a una hipoteca no siempre es fácil debido a los requisitos que exigen los bancos. La capacidad económica es uno de los aspectos que más tienen en cuenta, pero también la edad del solicitante.

Aunque legalmente no existe una edad máxima para pedir una hipoteca, los bancos y entidades establecen sus propios límites, pues consideran que el riesgo de impago aumenta cuando se alcanzan determinadas cifras.

¿Cuál es la edad legal máxima para pedir una hipoteca?

No existe ninguna ley ni regulación que establezca un límite de edad (ni máximo ni mínimo) para solicitar o devolver una hipoteca. Este requisito viene fijado por cada banco o entidad dependiendo de su política de riesgos.

El límite de edad que establecen los bancos y entidades para la finalización del pago del préstamo hipotecario suele rondar, por lo general, los 75 años (aunque la horquilla va de los 70 a los 80 años).

Esto quiere decir que se puede solicitar una hipoteca a los 40 años y pagarla en 35 años, o a los 60 y pagarla en 15.

Hipotecas conjuntas, ¿qué edad se tiene en cuenta?

En el caso de matrimonios o parejas que quieran solicitar una hipoteca de forma conjunta, de nuevo la última palabra la tienen los bancos y entidades según sus políticas. Algunos establecen el plazo máximo en el más joven y otros, en el que registra mayores ingresos.

Plazo de amortización

La edad del solicitante condiciona el plazo de amortización de la hipoteca, pues la deuda debe quedar liquidada al alcanzar el límite de edad de 75 años o el que haya fijado el banco o entidad.

Cuanto mayor sea la persona que quiere pedir este tipo de préstamo, menor será el plazo de amortización y, por ende, mayores serán las cuotas que deberá abonar cada mes, lo que aumenta aún más el riesgo de impago.

Por ello, muchos solicitantes de la Generación Senior que no tienen el resto de requisitos fortalecidos ven como el banco o entidad les deniega la concesión de la hipoteca. En cualquier caso, contar con un Seguro de Vida MAPFRE es una garantía más para los bancos a la hora de conceder hipotecas.

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Pese a todo, la edad no influye en las condiciones del préstamo hipotecario: tiene el mismo coste y se aplica el mismo tipo de interés que con el resto de clientes, aunque el diferencial puede variar.

Recomendaciones del Banco de España

Las personas que quieran pedir un préstamo no deben fijarse, únicamente, en si cumplen el límite máximo de edad establecido por las entidades. El Banco de España recomienda tener en cuenta ciertas consideraciones para que dicha solicitud vaya a buen puerto:

  • 30 años es el tiempo recomendado para la amortización de dicho préstamo. Por tanto, aunque se pueda, lo ideal es no solicitar una hipoteca pasados los 45 años.
  • No destinar más del 35 por ciento de los ingresos mensuales al pago de la hipoteca.
  • Tener al menos el 30 por ciento del precio del inmueble disponible para abonar la entrada y los gastos iniciales.