El “riesgo divisa”, aplicado a las inversiones, es la posibilidad de que uno o varios productos financieros se deprecien por el efecto de los tipos de cambio de las monedas. El dólar norteamericano, el euro, el yen japonés o la libra esterlina británica son las divisas más comunes.

No obstante, existe un mercado muy amplio a nivel global y los gestores de planes de pensiones y fondos de inversión como MAPFRE ofrecen diversas opciones a los inversores. Veámoslo con un ejemplo.

Plan de pensiones de renta variable japonesa

Imaginemos un inversor que contratara en agosto de 2021 un plan de pensiones de renta variable japonesa, que invierte en fondos referenciados al yen japonés. En el momento de la compra, el tipo de cambio se situaba en 331 yenes por euro. A fecha de noviembre de 2023, dos años y tres meses después, la divisa nipona se ha depreciado hasta los 164 yenes respecto a la moneda europea.

En el caso de que el inversor no haya contratado una cobertura para frenar el impacto del riesgo divisa, su inversión en el plan de pensiones habrá sufrido una depreciación relevante. En términos brutos, el valor de la inversión será más de un 20 por ciento inferior al que tendría si el tipo de cambio entre la divisa comunitaria y la nipona se hubiera mantenido en el mismo nivel registrado en agosto (331 yenes frente a 164 yenes).

Coberturas

Para mitigar los efectos de los tipos de cambio de las divisas en los planes de pensiones y fondos de inversión, los gestores cubren este riesgo en algunos productos. Es importante comprobar qué tipo de planes cubren la divisa antes de contratarlos, ya que así evitaremos situaciones desagradables en el futuro. Por lo tanto, para evitar el «riesgo divisa» tenemos dos opciones muy sencillas:

  1. No invertir en activos extranjeros, puesto que, de esta forma, eliminaremos completamente el “riesgo divisa”
  2. Contratar productos que cubran la divisa. No conseguiremos cubrir la inversión al 100%, pero mitigaremos sensiblemente el impacto. Una de las opciones es la inclusión de seguros, que reducen notablemente la repercusión de la volatilidad en las inversiones.

Pros y contras de las coberturas

La principal ventaja de contratar una cobertura para mitigar el “riesgo divisa” es que tendremos una mayor seguridad en nuestra inversión. En mercados de elevada volatilidad, esta característica aporta tranquilidad al inversor.

No obstante, contratar una cobertura implica gastos adicionales que, en ocasiones, pueden superar el propio impacto que el tipo de cambio tiene en la inversión. Incluimos aquí tanto las comisiones del gestor del seguro como el propio coste de la cobertura en sí. Protege siempre tus inversiones y tu Plan de Pensiones para asegurar tu tranquilidad a largo plazo.

CALCULA TU JUBILACIÓN