Cada situación es diferente, pero por lo general, tanto si eres el propietario de una vivienda que quieres poner en renta como si buscas hogar, alquilar una casa por inmobiliaria o a través de los servicios de un profesional suele ser una alternativa con diversas e interesantes ventajas en ambos casos.

Las ventajas para el inquilino

El futuro arrendatario busca hogar en alquiler con una serie de características y para cubrir sus diferentes necesidades y, aunque es cierto que es posible no dirigirse a una inmobiliaria y hacerlo por tu cuenta, por lo general es más sencillo contar con profesionales.

Ahorro de tiempo

Si no cuentas con mucho tiempo para encontrar tu casa perfecta para alquilar, no lo dudes, una inmobiliaria seria y profesional es la mejor opción para encontrar en el menor tiempo posible el hogar que necesitas. No es necesario ni que vayas a la inmobiliaria físicamente, con que le expreses tus necesidades por teléfono, por ejemplo, ellos se encargarán de seleccionarte diferentes propuestas para que tú elijas sobre una selección ya previa que te ahorra mucho tiempo y visitas.

Gestión segura y profesional

El alquiler siempre es recomendable hacerlo a través de un contrato completo y seguro. Lo normal es que si usas los servicios de una inmobiliaria, ellos se encarguen de facilitarte y gestionar el contrato de alquiler una vez hayas encontrado la casa que quieres alquilar con seguridad y experiencia, pudiendo solucionar además todas tus dudas o dificultades en este tema. Incluso asesorarte sobre ayudas al alquiler si eres jubilado, por ejemplo.

Precio

El alquiler a través de inmobiliaria respeta, por lo general, el precio de mercado de la zona en la que quieras vivir, pero es que, además, como su cantidad de inmuebles en alquiler es superior, lo normal es que puedan ofrecerte una amplia horquilla de presupuestos para que puedas elegir el que más se adapta a tus posibilidades.

    Ventajas para el dueño del piso en alquiler

    Si quieres arrendar un piso tú mismo puedes encargarte de la gestión del alquiler, pero tendrás que emplear tiempo y contar con una amplia disponibilidad si quieres encontrar un inquilino pronto y que cumpla con tus expectativas.

    Contar con los servicios de una inmobiliaria es lo más habitual entre los arrendadores.

    Comodidad

    ¿Vas a dedicarte tú mismo a alquilar tu casa? Perfecto, puedes hacerlo, pero cuenta con que tu teléfono debería estar siempre operativo igual que tu mail o cualquier otro medio de comunicación que pongas al servicio de tus potenciales arrendatarios. La respuesta rápida es clave para no perder futuros e interesantes inquilinos por lo que la dedicación debe ser lo más completa posible.

    Selección de inquilinos

    Si no estás dispuesto a alquilar tu casa al primer inquilino que lo solicite o le guste, el trabajo de selección es largo, complicado y puede llegar a ser muy incómodo. Tendrás que enseñar el piso, una y mil veces, convencer a los visitantes de sus virtudes y despejar todas sus dudas. El proceso suele ser largo y muy trabajoso. Por otra parte, tendrás que fiarte de tu instinto o pericia a la hora de elegir inquilino y los profesionales alertan de que no siempre en los casos de alquiler la primera impresión es la que cuenta.

    Garantía

    La formalización del alquiler a través de contrato es lo más seguro y recomendable para evitar futuros problemas, confusiones o malos entendidos, y a largo plazo es la única garantía que puede proteger tu casa al igual que contar con un seguro de alquiler. Aunque evites las inmobiliarias para buscar inquilino, lo habitual es que para formalizar el contrato de alquiler finalmente tengas que contar –y pagar- los servicios profesionales de un abogado o gestor de fincas para formalizar legalmente el alquiler y poder, además, cumplir con las obligaciones fiscales y disfrutar de sus ventajas, en su caso.

    ¿Qué inmobiliaria elijo?

    Con las ventajas sobre la mesa es fácil decidirse a contar con los servicios de profesionales para el alquiler de una vivienda, pero es cierto que la oferta es muy amplia y si no tienes experiencia en este tipo de situaciones puedes cometer graves errores y pagar muy caro este tipo de servicio. Tanto en el caso del arrendador como del arrendatario estos tips prácticos te ayudarán a no tener problemas.

    • Elige inmobiliarias o servicios relacionados con experiencia y reputación.
    • Evita firmar contratos de exclusividad.
    • Lee con atención cualquier tipo de contrato previo o en el momento del alquiler.
    • Atención a las cláusulas abusivas o a las que simplemente no entiendas, infórmate antes de comprometerte.

    No es necesario contar con los servicios de una inmobiliaria ni para rentar tu casa ni para buscar hogar para alquilar. Sin embargo, minimiza los riesgos y facilita en mucho este trámite que puede llegar a ser largo y demasiado intenso si se hace por libre.

    No obstante, siempre se trata de una decisión personal y en cualquier caso una vivienda para el alquiler de beneficios de estar protegida por un Seguro de Hogar MAPFRE que la mantiene en el mejor de los estados para su alquiler y permite que los daños accidentales que sufra sean siempre reparados sin gastos extras ni para el arrendador ni para el arrendatario.